El verdadero problema no es el feedback, es el clima que lo rodea
Muchos managers comparten una preocupación: temen que dar un feedback negativo dañe la relación con sus colaboradores. Su intención puede ser buena —cuidar el vínculo, mantener la armonía— pero el resultado suele ser el contrario. No decirlo también comunica Cuando el miedo a incomodar se impone, el líder empieza a evitar conversaciones difíciles. Se vuelve complaciente, resta importancia a los errores, posterga las correcciones o las disfraza de comentarios vagos. A corto plazo, el ambiente parece tranquilo. A largo plazo, el equipo se estanca. Los colaboradores no reciben la información que necesitan para mejorar, las tensiones no se resuelven y la [...]
